Las denuncias que hiciera hace un par de meses el empresario Edwin Gil contra algunos de los empresarios que tuvieron o tienen alguna relación con el Grupo Empresarial Antiqueño, GEA, generaron secretas repercusiones.
Y digo secretas por el malestar silencioso que generó el hecho que la opinión pública conociera la demanda interpuesta por el bufete del exfiscal Alfonso Gómez Méndez por estafa y otros delitos contra Mauricio Vélez y Alejandro Piedrahita entre otras personas.
Dicen los que saben, los que rumoran y especulan, que ese hecho le saldrá muy caro al director financiero de ARGOS, Alejandro Piedrahita debido a que el grupo económico, al que pertenece, le cobrará por ventanilla a través del resultado del análisis de los estados financieros del último año de la cementera.
Varios empresarios suspicaces que se reunieron en una finquita en Rionegro, a las que sólo tienen acceso los “pudientes”, manifestaron que, al parecer, los estados financieros de ARGOS son óptimos, pero sobre la base de las inversiones que adelantó en el extranjero, en otros países.
Dicen los chismosos que el balance financiero en Colombia no ha sido mayor cosa, situación que podría generar el despido de mil trabajadores de la cementera. El asunto es que en la supuesta empaquetada de los mil empleados que van pa’ afuera de ARGOS, van a incluir al señor Piedrahita. Ver ¡FALTÓN!
