martes, octubre 22, 2024

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CASI EVASORES

Evasion fiscal en Republica Dominicana. Domingo Alberto Guzman.Con la ampliación del cuadrante las propiedades y bienes de la familia del gobernador Sergio Fajardo quedaron incluidas para el pago de valorización que la Administración de Aníbal Gaviria decretará en los próximos días.

Durante la pasada alcaldía, habilidosamente el mismo Mauricio Valencia, director de Planeación en ese momento, intentó hacerle un esguince al derrame del pago para beneficiar tanto a familiares como a la empresa Fajardo Moreno, que se encargó, además, de la construcción hace un par de años el Centro Comercial Premium Plaza.

Los tristemente incluidos en el nuevo cuadrante son Mauricio Alberto Valencia Correa con la casita ubicada en Cedro Verde, dicen, avaluada en cerca de $6.000’000.000 (seis mil millones de pesos). Pagará por esa propiedad $747.000 (setecientos cuarenta y siete mil pesos).

Andrés Fajardo, representante legal de la CONSTRUCTORA FAJARDO MORENO, quería evitar pagar $43’000.000 (cuarenta y tres millones de pesos), mientras que su hermana Marcela María quería evadir entregar al gobierno local otros $7’900.000 (siete millones novecientos mil pesos).

La CONSTRUCTORA FAJARDO MORENO tendrá que pagar también otros $68’000.000 (sesenta y ocho millones de pesos). Y el Centro Comercial Premium Plaza exonerado en la alcaldía de Alonso Salazar, pagará en el gobierno de Gaviria $5.451’000.000 (cinco mil cuatrocientos cincuenta y un mil millones de pesos).

El pago de valorización descrito anteriormente iba a ser excluido de la lista de propiedades y bienes reportados en el gobierno de Salazar, pero con la ampliación del nuevo perimetro cerca a los $7.000’000.000 (siete mil millones de pesos) será lo que tendrán que pagar los amiguis y los Fajardo para impulsar el progreso de la Comuna 14 de esta ciudad… Ver documento

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Ruben Benjumea
Soy periodista por vicio y bloguero por pasión y necesidad. Estamos fortaleciendo otra forma de hacer periodismo independiente, sin mucha censura, con miedo a las balas perdidas, pero sin cobardía.