miércoles, abril 24, 2024

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CONSTRUCTORA CONDENADA

el arquitecto01Cerca de $1.200’000.000 (mil doscientos millones de pesos) tendrán que pagar la Fiduciaria Bancolombia y la Constructora Fajardo Moreno a la señora Gloria Stella Cadavid Gaviria, a quien le incumplieron con la entrega de un predio en la Urbanización Reserva del Tesoro, ubicada en la parte alta del barrio El Poblado.

El fallo en primera y única instancia fue proferido por el Tribunal de Arbitraje y Amigable Composición de la Cámara de Comercio de Medellín para Antioquia el pasado 5 de agosto de 2014.

Paradójicamente la señora Cadavid le metió los dedos a la boca a los Fajardo Moreno a diferencia de los muchos presuntos estafados por la constructora de la familia del Gobernador de Antioquia. En el momento de hacer el contrato para la compra del predio, la señora Gloria Stella hizo incluir una clausulita para que en caso de presentarse algún inconveniente, fuera la “justicia privada” la encargada de dirimir el inconveniente.

El Tribunal de Arbitramento es una institución jurídica que a través de un árbitro, que es un particular administra justicia cuando las partes involucradas en un conflicto lo acuerdan mutuamente. Dicho tribunal cuenta con las mismas garantías de imparcialidad, debido proceso y fallo en derecho que la administración pública de justicia y procede con mucha mayor celeridad, eso sí, sus costos son bastante onerosos.

Esa es precisamente la razón por la que, este fallo condenatorio ha sido el primero que tanto la Fiduciaria Bancolombia como la Constructora Fajardo Moreno tendrán que asumir a diferencia de los otros pleitos y denuncias en su contra que en la actualidad duermen el sueño de los justos.

SALIÓ MAESTRA

PUDBxdWAunque parezca mentira la señora Gloria Stella Cadavid Gaviria les salió adelante a los representantes de la Constructora Fajardo Moreno. El 5 de agosto de 2014, se pronunció el Tribunal, mediante Laudo Arbitral, señalando en uno de sus apartes: “considera el Tribunal que la señora CADAVID GAVIRIA no puede ser obligada a recibir (adquirir) un bien diferente al que negoció y mucho menos cuando la realidad es notoria y da cuenta de que el otorgamiento por ella de una escritura pública en la que se transfiere una casa que no existe, sería un acto excesivamente imprudente”.

En dicho fallo, se condena solidariamente a las dos empresas demandadas a pagar a Cadavid Gaviria la suma de $1.131’399.092, (mil ciento treinta y un millones trescientos noventa y nueve mil noventa y dos pesos) discriminados en $903’500.000 (novecientos tres millones quinientos mil pesos) por daño emergente, $84’995.164 (ochenta y cuatro millones novecientos noventa y cinco mil ciento sesenta y cuatro pesos) por perjuicios patrimoniales, y $142.903.928 (ciento cuarenta y dos millones novecientos tres mil novecientos veintiocho pesos) por costas del proceso.

El Concejal de Medellín Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, quien ha venido denunciando las presuntas irregularidades y estafas cometidas por la Constructora Fajardo Moreno, y quien además, recibió esta información, sostuvo que es necesario solicitar nuevamente a los administradores de justicia más celeridad en las diferentes denuncias y demandas en contra de la Constructora Fajardo Moreno que sobrepasan los $200.000’000.000 (doscientos mil millones de pesos).

“LA CASA EN EL AIRE”

casa en el aireEl 23 de septiembre de 2013 la señora Gloria Stella Cadavid Gaviria acudió ante la Cámara de Comercio de Medellín para que se constituyera un Tribunal de Arbitramento, con el fin de solucionar un conflicto con la Constructora Fajardo Moreno y la Fiduciaria Bancolombia con respecto al encargo fiduciario sobre el Lote Nº1 ubicado en la Urbanización Reserva del Tesoro, que la demandante aspiraba a recibir como restitución de beneficio, es decir, como contraprestación de su inversión de $650’000.000 (seiscientos cincuenta millones de pesos) en el fideicomiso.

La demanda se fundamenta en que la señora Cadavid Gaviria, el 15 de diciembre de 2005, firmó con la empresa Fajardo Moreno un documento de compromiso en el que se sumaba al patrimonio autónomo con la suma mencionada a cambio de que luego se le restituyera como beneficio el lote también mencionado de 2.500 metros cuadrados para construir una vivienda.

En el momento de constituirse como propiedad horizontal, la Urbanización Reserva del Tesoro quedó registrada con una vivienda construida en el Lote Nº1, que no existe. Cadavid recibió el lote a título de mera tenencia, mientras se tramitaba la escritura pública, y tuvo que pagar Impuesto Predial y la cuota de administración sobre el lote y la casa que no existe.

Para ajustar, el lote no tiene vía de acceso, incluso, por uno de sus linderos se encuentra construida la vía para ingresar al Lote Nº2, sin que se haya constituido servidumbre. Dice el mismo fallo que según estudio de la empresa de ingeniería de suelos VIECO del 18 de febrero de 2010, el lote tiene fuertes pendientes que reposan sobre contenciones en gaviones y la existencia de posibles llenos, lo que encarece el proceso de construcción que en el sector se pretenda y que la constructora Fajardo Moreno tampoco ha cumplido con las obligaciones urbanísticas relativas al proyecto.

En la demanda se solicita la devolución del dinero pagado por la señora Cadavid en el fideicomiso administrado por Bancolombia y los pagos que debió realizar por Impuesto Predial y cuotas de administración.

Aunque los demandados contestaron que la señora Cadavid recibió el lote sin oponerse en donde se puede construir, el árbitro Jorge Parra Benítez, desestimó los argumentos sobre las deficiencias del lote, pero acogió la inexistencia de la casa que se supone estaba construida en el lote, como excusa válida para que Cadavid Gaviria se negara a firmar la escritura pública, y por el contrario, sostuvo que quienes incumplieron fueron las empresas demandadas, pues estaban entregando algo diferente a lo que se comprometieron. Ver Fallo

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Ruben Benjumea
Soy periodista por vicio y bloguero por pasión y necesidad. Estamos fortaleciendo otra forma de hacer periodismo independiente, sin mucha censura, con miedo a las balas perdidas, pero sin cobardía.