Con casi seis meses de trabajo de los nuevos gobiernos territoriales, empezaron a notarse las simpatías políticas, que en determinado momento, podrían evidenciar apoyos importantes para las próximas elecciones presidenciales.
Las declaraciones del Alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez Zuluaga, en las que pidió a la ciudadanos del país escuchar el expresidente Álvaro Uribe, quien propuso “resistencia civil” con respecto a los diálogos de paz, tiene a más de uno pensando.
Esa declaración, para muchos analistas, es el comienzo del divorcio entre Juan Manuel Santos y Gutiérrez Zuluaga, si se tiene en cuenta que el Presidente de la República fue otro que cabresteó al nuevo mandatario en las elecciones de octubre pasado junto con algunos empresarios del GEA.
El espaldarazo de Fico Gutiérrez a Uribe, acérrimo enemigo político de Santos, es la evidencia que está pasando algo en Antioquia y Medellín que podría cambiar sutilmente el panorama para las elecciones presidenciales de 2018, especialmente para los aspirantes que tienen afectos entre los empresarios del Grupo Empresarial Antioqueño y los actuales gobiernos Departamental y Municipal.
