La democracia colombiana es insulsa, precaria y engañosa, los poderosos se han encargado de hacerla ver como el sistema perfecto. Sistema que se ha encargado de tener al país punteando el ranking de los más desiguales del mundo, sistema que ha permitido que uno de los hombres más ricos del mundo, en el puesto 88, sea un honorable colombiano, pero mismo país donde una buena porción de la población vive en situaciones precarias.
Cuando se acerca el primer round de las contiendas electorales que tienen cautivada la atención de un sector de los nacionales, que ven con preocupación, unos, el peligroso avance de la izquierda radical, que acabará con la Colombia perfecta en la que vivimos, y otros, la terrible amenaza que para el proceso de paz es la cercanía en el poder de la derecha, la intención del establecimiento es que todos los ciudadanos, llevados de la ternilla vayamos a votar, y es allí donde aparecen las encuestas, las listas milagrosas que nos salvarán de una u otra cosa, el señalamiento del bueno, el malo y el feo.
La semana anterior la w publicó una lista de 100 congresistas escogidos por un poco más de 260 catedráticos de 63 universidades del país que ofrecen el programa académico de politología o afines y que en el concepto de ellos son los mejores candidatos a formar parte de uno de los peldaños de la escalera más necesaria del sistema político que impera en nuestro país: el Senado de la República.
La lista no dejó contento absolutamente a nadie y por el contrario ratificó que bien sea entre personas con una mediana preparación académica, llamados a liderar un voto de opinión o entre el pueblo en general, las elecciones en nuestro país son un asunto completamente clientelista.
Que en una lista construida por personalidades como esas, aparezcan nombres como el de la abogada de la “gata”, de Iván Márquez, de Roy Barreras o del mismo Álvaro Uribe, deja mucho, pero mucho que desear y demuestra que nuestras preferencias políticas hacen caso omiso de las verdades jurídicas e ideológicas de nuestros candidatos.
Según la lista que se puede observar de manera completa en la página de la emisora, 21integrantes de ella hacen parte del moribundo Polo Democrático, 17 de Centro Democrático, los verdes y la lista de los decentes cada una con 12, los liberales 11, los conservadores 9, Cambio Radical y la Fuerza Alternativa del Común de a 5 cada una y el movimiento Mira, que recuperó después de 4 años tres curules que le habían sido robadas y que renunció a la millonaria indemnización a que tiene derecho, tiene uno.