Don Quijote tiene su Sancho, su nuevo ministro de Justicia, quien confirmó que se revivirá la posibilidad de convocar a una Asamblea Constituyente.
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Como Don Quijote de la Mancha, el presidente Petro continúa su lucha contra los molinos de viento. Además del desgaste que le ha generado la convocatoria de la posible Consulta Popular quiere revivir nuevamente el debate de una Asamblea Nacional Constituyente para ocultar su baja y modesta gestión como líder y gobernante.
Don Quijote cabalga con Sancho, hoy su nuevo ministro de Justicia, Eduardo Montealegre, quien confirmó que el Gobierno revivirá la posibilidad de convocar a una Asamblea Constituyente, además que ratificó que la Consulta Popular que deberá realizarse el 7 de agosto próximo.
Montealegre argumentó que existen instituciones consagradas en la Constitución de 1991 que, en su opinión, se han convertido en obstáculos para el cambio social, además que defendió la decisión del presidente Petro de convocar la consulta popular por decreto tras considerar que el Congreso incurrió en graves irregularidades durante la votación de la iniciativa.
Montealegre detalló que el “decretazo” presidencial, firmado por todos los ministros, fija la fecha de la consulta popular para el 7 de agosto de 2025, un día simbólico en la historia colombiana.
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Además, subrayó que el Gobierno remitió el decreto a la Corte Constitucional para su control posterior, además que se ordenó a la Registraduría y a las autoridades electorales iniciar la logística necesaria para garantizar un proceso.
Sin embargo, mientras Montealegre defiende la legalidad de la medida, el ministro del Interior, Armando Benedetti sugirió que el Ejecutivo podría desistir de la consulta si el Senado logra concertar la reforma laboral en el Congreso.
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