La Alcaldía de Medellín tiene previsto decretar el lunes 22 de septiembre el derrame de valorización en los sectores de El Poblado, Guayabal, y el centro, especialmente para los barrios Loreto y la Asomadera, además de la vereda Las Palmas del corregimiento de Santa Elena.

Lo que no saben los medellinenses es que el perímetro inicial para dicho cobro, dineros con los que se adelantarán unos 20 proyectos de urbanismo, dice la Alcaldía, excluía los proyectos adelantados por la CONSTRUCTORA FAJARDO MORENO como el Centro Comercial Premium Plaza, entre otras obras habitacionales como Panoramika y Reserva del Tesoro donde viven los hermanitos Rodrigo y Andrés Fajardo Valderrama.

El viejo perímetro fue presentado durante la Alcaldía de Alonso Salazar por el entonces ex secretario de Infraestructura Física, ex director de Planeación y actual secretario de despacho departamental, Mauricio Valencia, quien en la actualidad fue destituido en primera instancia por adjudicar de manera irregular un contrato por $90.000’000.000 (noventa mil millones de pesos) para la construcción de 4.1 kilómetros de la doble calzada hacia el Túnel de Occidente.

Después de conocerse el perímetro arreglado por Valencia a su amaño, la administración de Gaviria lo amplió de manera más justa y equitativa, incluyendo los proyectos construidos por la empresa de la familia del gobernador que bajita la mano tendrán que desembolsar más de $7.000’000.000 (siete mil millones de pesos) al municipio.

El centro comercial Santa Fe, por ejemplo, pagará $19.000’000.000 (diecinueve mil millones de pesos), mientras que Premium Plaza desembolsará otros $5.000’000.000 (cinco mil millones de pesos). Los proyectos habitacionales, adelantados por los FAJARDO, incluida la propia casa de Mauro Valencia, se meterán la mano al bolsillo para sacar $2.000’000.000 (dos mil millones de pesos) más que tendrán que entregar al erario en un periodo no superior a los seis años…

VALENCIA TORCIÓ

De acuerdo con el concejal de Medellín Bernardo Alejandro Guerra, la Administración de Alonso Salazar a través de la Dirección de Planeación adelantó en su momento de manera torcida y confusa, la delimitación de las zonas de la Comuna 14, que también pagará valorización para obras públicas.

El diseño del cuadrante que lideró el entonces Director de Planeación, Mauricio Valencia, era completamente amañado. De él, excluyeron las viviendas de varios de los familiares del actual gobernador para evitarles el pago de la valorización.

Dicho cuadrante, tajada, franja, o pedazo de tierra, donde están ubicados los inmuebles que tendrán que pagar el derrame se encuentra de sur a norte, sobre el Río Medellín entre la frontera con el municipio de Envigado y la calle 30. De ese punto sube por la Loma de San Julián para continuar por la Avenida Las Palmas y seguir por la Transversal Superior y empatar por la Loma El Tesoro-Los Balsos, más o menos.

La confusión de la Alcaldía se presentó en la parte superior del cuadrante, es decir, en la parte alta de El Poblado, donde viven “Los Fajardo” y además, el mismo Director de Planeación Mauricio Valencia, debido a que se presentan varias “torceduras”, esguinces y distenciones, donde de manera “extraña” la línea imaginaria de color rojo exoneraba a estas propiedades del pago de su obligación.