Hace un par de días le dije a una colega que se está estrenando como asesora de un primíparo político que si continúa creyendo en la buena voluntad e intención de los integrantes del grupo de “demócratas” que administran la cosa pública permanecerá engañada hasta que la Divina Providencia le haga el milagro.
A mi amiga periodista le soplé un ojo para hacerle entender que siempre los peores gobernantes serán los próximos y que la situación política, administrativa, social y económica de la ciudad para no salirnos de Medellín continuará siendo igual con una disimulada tendencia que convierte a los más pobres en paupérrimos y a unos pocos en más ricos…
-Vea mija, le dije, existen unos políticos que son una mierda, clientelistas y acomodados que se mueven de acuerdo a sus intereses personales como lo que ocurrió con Carlos Mario Montoya, quien perdió toda clase de decencia y quien hoy es capaz de sentarse a la derecha del mandatario seccional después que lo trató de ladrón.
– Mire, sostuve, lo mismo pasa con nuevo Gerente el Indeportes, Hernán Darío Elejalde López, hijo del viejo y chamuscado político Ramón Elejalde Arbeláez, uno de los escribas por encargo más importantes de la casa editorial de la Iguaná de propiedad de los Gaviria Correa.
Ramón Elejalde Arbeláez cuando cambió de gobierno, cambió de pensamiento y eso en los políticos es normal, no se ruborizan. Cuando Luis Pérez se coronó como electo Gobernador el 25 de octubre del año pasado en las horas de la noche, automáticamente, para los Elejalde, se convirtió en mejor persona.
En un artículo publicado en el periódico de La Ayurá el mes de mayo de 2012, Ramón Elejalde Arbeláez estaba convencido que Luis Emilio Pérez Gutiérrez era un mal perdedor que quería hacerle daño a la Administración de Aníbal Gaviria y a Medellín.
Habrá que preguntarle a Ramón qué opina del Gobernador después de que su hijo hace parte de la nueva Administración Departamental. Ver artículo
