viernes, julio 26, 2024

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EFECTO ALUCINADOR

sofia-gaviria-abril-2015La Senadora Sofía Gaviria debería leer el libro “Mi hermano el Alcalde” de Fernando Vallejo en el que el escritor antioqueño hace mofa de la actividad política de su hermano Alberto cuando fue electo Alcalde de Támesis en el suroeste del Departamento.

Amor no quita conocimiento. Cualquiera que sea electo Alcalde de Medellín adquiere el presupuesto y la posibilidad de tener los asesores necesarios para un buen desempeño en el cargo. Pero Gaviria ni eso.

Restructuró el aparato municipal donde creó vicealcaldías que fueron suprimidas por el nuevo gobierno. Pero la reestructuración de Gaviria quedó tan mal que tuvo que contratar a la firma Konfirma para que adelantara la evaluación de procesos en contratación. ¿Para qué sirven entonces la Secretaría General y cada una de las Direcciones Jurídicas del Municipio?

Increíble en Sofía que se atreva a decir que Aníbal fue el mejor Alcalde que Medellín ha tenido cuando el proyecto Parques del Rio tiene más de $122.000’000.000 (ciento veintidós mil millones de pesos) de sobrecosto sin contar otros casos especiales como ventas irregulares de lotes de tierra en la Mayorista, entre otros casos.

Sofía Gaviria debe entender que su hermano fue Alcalde, no por su talento, ni su academia, menos por su imagen. Aníbal fue electo porque se comprometió a continuar partiendo la torta del Estado en beneficio de los empresarios que junto con Fajardo, crearon el mejor efecto maquillador para lograr que la mayoría de electores los siguieran como montañero de pueblo corriendo detrás de un globo para llegar a Medellín.

No voy a negar que Aníbal y Sofía tienen buenas intenciones con la ciudad y con todo lo que tocan, pero también es cierto que de buenas intenciones está construido el fracaso…

Ruben Benjumea
Soy periodista por vicio y bloguero por pasión y necesidad. Estamos fortaleciendo otra forma de hacer periodismo independiente, sin mucha censura, con miedo a las balas perdidas, pero sin cobardía.