Preocupaciones son las que tienen algunos de los integrantes de Centro Democrático en Medellín y Antioquia, especialmente los que quieren repetir campaña para conservar curules no solamente en el Cabildo Municipal, sino también en la Asamblea Departamental.
Y están preocupados por la sencilla razón de que el Ministro Carrasquilla les está limitando el discurso para salir a la calle a conseguir votos. El asunto es que a 23 días de haberse posesionado el nuevo Presidente Iván Duque Márquez, el recién designado Ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla ha anunciado lo contrario de lo que se prometió en campaña electoral, asunto que tiene arrepentido a más de un uribista.
Los anuncios sobre los componentes de la próxima Reforma Tributaria que hiciera Carrasquilla desde Cartagena le reventó el tímpano a más de uno por el hecho que se disminuirán los impuestos a las grandes empresas del país con la excusa de generar empleo, mientras que los integrantes de la clase media recibieron la noticia que ingresarán al escabroso periplo de pagar impuestos de renta, especialmente los que se ganan dos salarios mínimos legales mensuales.
“Beto” Carrasquilla quien permanece escandalizado por lo oneroso del actual salario mínimo mensual, diseñó también una propuesta para grabar con el Impuesto de Valor Agregado, IVA, a todos los productos de la canasta familiar. Huevo, sal, arepa y arroz con IVA, para Carrasquilla es un risotto criollo, digno de meterle impuesto…
Pero si por el Palacio de “Nari” llueve, por las curules del Congreso de Centro Democrático no escampa. El también anuncio que hiciera el Senador Álvaro Uribe sobre el Proyecto de Ley para incrementar por una sola vez de manera extraordinaria el salario mínimo mensual para tres millones de trabajadores del país, en promedio, generó más suspicacias que alegrías…
La semana anterior tras conocerse la noticia más de uno brincó de felicidad, pero al explicarse la propuesta, lloraron en sensata realidad. De eso tan bueno no dan tanto…
La propuesta hecha por Uribe, más que un incremento, es una bonificación para esos tres millones de trabajadores del país, debido a que el monto iría a parar a los fondos de cesantías que tienen utilización especifica: vivienda, estudios o desempleo.