¿Qué es lo que tiene de novedoso y original el político Anibal Gaviria Correa para que lo quieran hacer ver como el “top of mind” de la actual campaña política?
Esa pregunta es la que se responderá una vez el exalcalde y exgobernador tome la decisión de aparecer en el escenario público para que recomponga la carga electoral que perfilará alianzas y estrategias, cruciales para lograr el triunfo el domingo 27 de octubre próximo.
Por el momento, ya se habla de la próxima renuncia del Secretario de Salud de Antioquia, Carlos Mario Montoya, quien engrosaría las filas del hijo del ínclito “Negro” Gaviria.
Ya, inclusive, el Secretario de Agricultura Departamental, Jaime Garzón renunció al cargo, porque dicen, quiere gerenciar la campaña de Anibal. Con esa renuncia se ratifica que el concejal liberal Fabio Humberto Rivera, junto con sus amigos el gerente del Ferrocarril Omar Hoyos y “Tavo” Rodríguez también se encuentran tirando pa’l mismo lado.
Anibal Gaviria se convirtió en todo un acertijo y en una incógnita, pero es fácil deducir que su objetivo es dilatar hasta el último momento su aparición en la agenda pública con el propósito de evadir las preguntas obligadas que se le harán frente a sus responsabilidades en la emergencia de Hidroituango, el sobrecosto en la compra de Aguas de Antofagasta y la venta irregular del Lote 24 de la Mayorista que defraudó las arcas del Municipio de Medellín entre otros temas…