Como se esperaba, la Concejala de Medellín por el Partido Polo Democrático Alternativo, Luz María Múnera Medina presentó renuncia al partido a partir del 31 de diciembre, día en el que también termina su periodo como cabildante de la ciudad.
Múnera Medina, hizo su mayor esfuerzo para sostener la curul en el Cabildo Municipal, pero “mi partido me dejó sola”, dijo en plenaria, pero yo diría que no únicamente la dejó sola, sino también, hizo el mayor esfuerzo por calcinarla…
Luz María Múnera Medina, se ha destacado por ser una lideresa que se ha movido en las clases populares más desfavorecidas, fue vocera estudiantil en la Universidad de Antioquia donde estudio comunicación social y periodismo.
Luego, al culminar estudios en Administración Pública en la ESAP se vinculó al Polo Democrático, partido en el que conoció al Senador Jorge Robledo y al entonces Diputado Jorge Gómez con quien hizo fórmula para llegar al Concejo de Medellín por primera vez.
Inmersa en el Movimiento Obrero Independiente Revolucionario, MOIR, caracterizado fundamentalmente por voltearse peor que un desvelado, Múnera Medina se negó a apoyar la candidatura a la Presidencia de la República de Sergio Fajardo, un neoliberal con disfraz de profesor.
Uno de los principales argumentos de Luz María para irse del MOIR fue manifestar la falta de coherencia política de Jorge Gómez quien criticó a muerte al exgobernador Fajardo, pero luego pasó a apoyarlo por la orden que le dieron desde Bogotá.
Esa decisión de Luz María Múnera, de ser coherente, de cumplir la palabra fue lo que le cobraron en las pasadas elecciones los integrantes de su propio partido, querían quemarla, y lo lograron…