Con el comienzo de los nuevos gobiernos local y regional empieza también a revelarse la dinámica con la que se relacionarán dichas administraciones con los integrantes de las respectivas corporaciones Concejo y Asamblea.
Después de la protesta “pacífica” que se presentó en contra del gobierno de Iván “El Paquetazo” Duque Márquez, el Concejo de Medellín se puso bastante caliente debido al ataque desmedido contra una chica por parte del grupo antidisturbios, el ataque de los “capuchos” contra un empleado bancario y actos vandálicos contra las instalaciones de Bancolombia y el hotel de Manuel Molina.
Esos hechos fueron el tema principal en la corporación donde están polarizados los ataques políticos: Alfredo Ramos vs Daniel Quintero con varias particularidades.
Una de ellas es que el excandidato a la Alcaldía Alfredo Ramos Maya, quien recibió como premio de consolación una curul en el Concejo, se encuentra solo porque ni sus compañeros de bancada se quieren sentar al lado de él; mientras Daniel Quintero, el Alcalde, tiene al cabildante Alex Flórez, un costeño malcriado en Medellín que lo defiende.
Ramos Maya, se refirió a las protestas, y en especial, a unas declaraciones de Quintero en las que dice que hay un “perdedor” que desea liderar la revocatoria de su mandato.
Terminada la intervención del hijo del exgobernador, el concejal del Oficialismo Independiente Alex Flórez le dio lo suyo a Ramos Maya. Lo mínimo que le dijo fue que en la protesta pacífica: “nosotros no marchamos con Popeye”.
