En el Informe de Auditoría adelantado a la Caja de Compensación Familiar de Antioquia, COMFAMA, correspondiente a la vigencia 2015 que ordenó la Contraloría General de la República desde Bogotá, bastante extenso, por supuesto, hay una observación que genera tanto halitosis como apnea de sueño.
Desde la dirección de la Caja, no se entregó la totalidad de la información para la auditoria, además, que los supervisores tampoco pudieron ingresar a las plataformas digitales con el fin de verificar procesos administrativos y financieros.
En la página seis del informe dirigido al expresidente de UNE Comunicaciones y actual Director de COMFAMA, David Escobar Arango los auditores manifiestan que:
“En el desarrollo de la auditoría se presentaron limitaciones derivadas de no poder acceder a la plataforma de intranet de la Caja para poder tener conocimiento directo de información necesaria para evaluación de las áreas auditadas, además la información contractual y financiera se suministró de manera fragmentada lo que generó atrasos y reprocesos en el análisis efectuado”. Ver documento
En lo que tiene que ver con -Procesos Administrativos- la auditoría explica: “En este componente se evidenciaron debilidades en la ejecución del plan de inversiones de la vigencia e inobservancia de requisitos ambientales en el desarenador del Parque Recreativo de Rionegro (…)”. Ver documento
El problema con el desarenador tiene que ver con la ineficiencia e ineficacia de la Dirección de María Inés Restrepo de Arango y sus cómplices, entre el que se cuenta el exsubdirector de Control Gestión Fernando Yepes que hicieron lo posible por tapar el presunto detrimento patrimonial en el Parque Recreativo de Rionegro. Ver ¡QUÉ PANTANERO!
La verdad es que hay mucho más que iremos revelando con respecto a los resultados de la auditoria adelantada por la Contraloría General de la República. Entre otras de las presuntas irregularidades de Restrepo de Arango que dejó sin aclarar, cuando la sacaron por la puerta de atrás de su puesto de trabajo, tiene que ver con su pésima gestión contractual por la sencilla razón de que no se exigía la documentación de ley.
La auditoría con respecto a la -Gestión Contractual- revela que: “se evidenciaron inconsistencias en los contratos analizados, relacionadas con deficiencias por falta de soportes de los contratos, garantías y pólizas, deficiencias en la supervisión y seguimiento en el desarrollo de los contratos y en la gestión documental de los mismos”. Ver documento
Continuará…
