Como una “Monarquía Criolla” calificó la excandidata a la Presidencia de la República por el Partido Conservador, Marta Lucia Ramírez el hecho de que el Presidente Santos haya enviado a su hermano Enrique a la Habana a intentar desatrancar los diálogos de paz entre el Gobierno Nacional y la guerrilla de las Farc.
La llegada a la Habana del emisario del Presidente desató una polémica debido a que se cuestiona la legalidad o no del ingreso a la mesa de dialogo de Enrique Santos Calderón, hermano del mandatario nacional.
La realidad es que el “corte programado” como lo llaman desde la Presidencia más conocido como “racionamiento de energía” y hace unos veinte años como “apagón” le servirá en estos días como cortina de humo al Presidente Santos para bajarle la calentura al estancamiento del proceso de paz entre gobierno y guerrilla.
Para desatrancar las conversaciones a Enrique Santos le tocará concertar el cese bilateral del fuego, la manera en la que se crearán las zonas de concentración de las Farc, la refrendación del proceso y la entrega de armas.